Ya lo decía yo!

Y si, era de esperarse... el maxi-kiosco que se hace llamar empresa y que me paga el sueldo, no para de darme sorpresas, y obviamente siempre son desagradables.
El jueves me llamaron los chicos del equipo que trabaja conmigo, para contarme que la consultora perdió la licitación y por ende, le deja de prestar servicios a la "institución".
Para los que recién caen por acá explico brevemente mi situación laboral: yo trabajo en sistemas, y soy empleada de una consultora. La consultora (a.k.a. el maxi-kiosco) le presta sus servicios a la "institución", aunque sus servicios no sean ni más ni menos que NOSOTROS, es decir, los recursos.
Hace 8 años que trabajo en la "institución", y en realidad, a los de la consultora los veo nomás cuando tengo que resolver algún quilombo administrativo, o para la fiesta de fin de año. Pero así son por lo general las cosas en sistemas...
La cuestión es que la semana que viene me tengo que presentar a una reunión con la consultora que se va a hacer cargo de los servicios, para que me hagan una propuesta. En caso de aceptarla, la nueva consultora me absorbe y sigo trabajando en la "institución" pero siendo empleada de una empresa nueva.
El tema es que la consultora que se hace cargo no me gusta. Toda la vida dije que yo ahí no trabaja ni en pedo. Es una consultora internacional que exprime a la gente, les paga poco y les hacen creer que vos sos el que tiene que estar agradecido por trabajar para ellos. A los pocos que les pagan bien, les chupan la sangre hasta la última gotita.
Voy a ir a escuchar la propuesta por un tema de educación, pero ya sé que voy a contestar que no. Va contra mis principios. Si me van a pagar poco, prefiero irme a un lugar más tranquilo que la "institución" ya que ahí el laburo es bastante estressante, y si me ofrecen mucha plata a cambio de que viva para laburar, lo siento pero hoy por hoy la prioridad es mi familia; tengo un hijito chiquitito que requiere a su mamá.
Suponen que alguien del maxi-kiosco me llamó para contarme lo sucedido? NO. Esperaron a que me llamen los chicos y luego me llamó una persona que no conozco para decirme "ya te avisaron tus compañeros de lo que pasó, no?", y para decirme que me tengo que presentar para la propuesta.
No sé, yo la semana que viene voy a llamar a la consultora porque a decir verdad, soy empleada de ellos. Si no quiero cambiarme de consultora, que? Me tienen que asignar a otro cliente? Me tienen que echar? Ni idea.
Con una mano en el corazón, preferiría que me echen y que la indemnización me permita quedarme un tiempito en casa con mi gordo, pero no creo que me salga tan redondito.

Número caprichoso

En mi familia se da una extraña coincidencia (bah... a mí me parece extraña, capaz que a la gente le parece una pavada).
Yo cumplo años el 25 de enero. Tengo 3 sobrinas: G, cumple años el 29 de marzo, F cumple el 14 de mayo y M cumple el 14 de julio. Mi sobrina G tiene un hijo, L, que cumple años el 25 de julio, y mi sobrina M tiene dos hijos, N que cumple años el 18 de marzo y T que cumple el 3 de enero.
Mi tía A cumple años el 14 de enero, y mi primo R cumple el 3 de mayo.
Ahora después de tantas fechas que pueden parecer intrascendentes, viene lo que para mí es curioso:
- La tía A cumple años 11 días después que T.
- Yo cumplo años 11 días después que la tía A.
- G cumple años 11 días después que N.
- F cumple años 11 días después que R.
- L cumple años 11 días después que M.

Mi hijo tenía fecha de cesárea programada para el 9 de abril, lo cual hubiera hecho que cumpla años 11 días después que G, pero el atorrante no quiso esperar y nació el 31 de marzo, quedando fuera de las coincidencias familiares. Eso sí, pudimos traerlo a casa 11 días después de su nacimiento...

PD: ya probé jugarlo a la quiniela, pero no gané ni un peso.

Hoy

Hoy soy tan feliz que podría llorar... Quisiera detener el tiempo, y que nada cambie, nunca. Hoy soy tan feliz que me muero de miedo, miedo de perder algo de todo esto.
Hoy me miro en el espejo y digo, si pudiera cambiar algo, que sería? Nada. Todo lo que alguna vez fue, me permitió llegar hasta acá, y acá y ahora soy feliz.
Los miro dormir, y podría llorar, porque se me hace un nudo en la garganta y me lo banco, porque los llantos de felicidad no se comprenden muy bien. Pero es que nunca pensé que se podía amar tanto, y los amo sin medida, con un amor infinito y eterno.
Los miro dormir y desearía ser invencible, para protegerlos y que nunca sufran, que nunca les pase nada malo, que nunca me falten...
Estoy cansada y con miles de preocupaciones, y sin embargo soy feliz. Es una combinación extraña.
Me alcanza con mirarlos. Me alcanza el torrente de amor que me entra por los ojos, tan sólo mirándolos dormir.