Quiero mi bate de baseball!

Yo quiero hacer la de Michael Douglas, quiero tener mi día de furia, quiero tener mi bate de baseball y repartir batazos a todos aquellos que se cagan en el prójimo impunemente. Sobre todo en el tránsito, poniendo en riesgo sus vidas, la mía, la de todo el mundo...
No quiero pegarle a la gente, que no se malinterprete! Pero por ejemplo: al pelotudo que el domingo andaba por la autopista del oeste en una moto blanca llevando una criatura, ambos sin casco, y que nos obligó a cederle paso siendo que nosotros íbamos a 120 km/h y al pasarnos nos puteó de arriba a abajo, y no contento con eso, como el negro le hizo luces por inconsciente, en una rápida maniobra se nos puso al lado para poder golpearnos (y abollarnos) el auto, y luego cruzó la autopista de lado a lado poniendo en riesgo su vida y la de la criatura, para salirse en la primera bajada (que valiente eh?!), a ese pelotudo, cuando yo tenga mi bate de baseball, le agarro la moto a batazos y cuando termine con ella, no le va a servir ni para venderla pieza por pieza como repuesto. Se entiende?
Ya lo saben, cuando en Crónica aparezca la placa roja que diga: "La loca del bate siembra el terror entre los impunes del tránsito", estarán hablando de mí...

Sensibilidad fílmica - Parte II

Retomando el tema de este post, mi patética sensibilidad fílmica a veces me hace pensar que tengo algún chip en corto. Y a las pruebas me remito...

Ayer llegué a casa desde el trabajo, muerta de frío, y aprovechando que el negro no llegaba de trabajar hasta las 11 de la noche, decidí regalarme un rato de ocio haciendo una de las cosas que más me gustan: ver una película.
Así entonces, me preparé una sopita Quick, introduje en el DVD la película "El Descanso" (The Holliday), me arropé en el sillón con la manta de polar (hurtada oportunamente a Mexicana de Aviación), tomé los controles remotos, y me dispuse a disfrutar de la película.
Debo decir algunas cosas; la primera es que la película me encantó, es una película romántica sin demasiado trasfondo, pero me pareció muy linda, me encantan los actores, sobre todo Jack Black y Kate Winslet, y me llevé una sorpresa muy grande con Jude Law a quien siempre consideré sólo una cara bonita (muy bonita, por cierto), y a partir de esta película, lo considero también un buen actor.
Pero el tema en cuestión es... como lloré, por favor!!! Y si lo pienso, no es para llorar tanto, pero hubo tres escenas que me dejaron a moco tendido! (estaba tentada de contar cuales fueron las escenas, pero si alguien no la vió y quiere hacerlo, le estaría develando algunos datos fundamentales).
No puedo entenderlo, lo sigo pensando y todavía sigo sin entender si es un exceso de sensibilidad, o si vine fallada de fábrica... De todos modos, debo reconocer que disfruté mucho la película, y si les gustan las románticas, se las recomiendo.

¿Por qué callamos?

Porque te sentís sucia y culpable... si, culpable, infinidad de veces pasa por tu mente que algo habrás hecho y las consecuencias no son más que causa y efecto.
Porque sabés que siempre habrá alguien que lo defienda y te defenestre, haciéndote sentir la peor mierda del universo.
Porque tenés miedo a las represalias... porque tenés miedo de que te llamen mentirosa, y tenés vergüenza a la exposición.
Porque tenés miedo de la reacción que van a tener aquellos que saben que no mentís.
Porque cuando uno es chico, no tiene la claridad mental suficiente para manejar la situación.

Por suerte algunas se animan y hablan, por suerte a veces la justicia castiga ejemplarmente, por suerte a veces la vida reivindica a los que callan...

Etimología de la puteada

ATENCION!!! El presente post, contiene lenguaje procaz y soez, que podría herir la sensibilidad del lector. Aconsejo omitir la lectura del mismo, a toda aquella persona que pudiera sentirse ofendida ante el lenguaje inapropiado.
Yo avisé, así que no acepto comentarios quejosos al respecto!

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El otro día, hacía un repaso mental de los improperios que suelo proferir en momentos donde escasea la calma, y me preguntaba cual sería el origen de los mismos, porque ninguno de ellos ha sido invento mío, y tomados en forma literal, carecen de sentido totalmente. Por lo cual, traté de entenderlos en forma metafórica o figurativa exclusivamente.
Aquí, algunos ejemplos:

• Haceme reir los pelos del orto: sería la versión ordinaria de "ni lo sueñes!" o la más cool "seguí participando". Se utiliza por contraposición, es decir, lo que se solicita es tan imposible de conseguir, como que la vellocidad mencionada se ría.
  
• Sopapeame la papirola: siempre la usé como la versión femenina de "chupame un huevo", luego me enteré lo que venía a ser la papirola, y tampoco aplica a una mujer, pero la sigo usando porque no todo el mundo sabe a que hace referencia la papirola, y por lo tanto, no lo cuestionan.
  
• Tu vieja en tanga! (o la todavía más enfática "tu vieja en tanga de leopardo!"): utilizado como la versión sutil del ya clásico "andá a cagar". Carece de todo tipo de sentido (ya sea figurado o literal), sólo pretende ofender tocando la fibra íntima del destinatario.
  
• Hijo de un vagón repleto de putas: esta no requiere explicación, pero todos sabemos que por más putas que haya en el vagón, la madre es una sola. Pretende apelar a la exageración para dejar en evidencia la calidad de persona del detinatario.
  

Es probable que este artículo sea editado en cuanto vengan a mi memoria más ejemplos. Por ahora, espero que esto sirva para exponer la idea.

Back in town

Estoy de vuelta, se me pasó la mufa blogueril o por lo menos logré dominarla...
El fin de semana me sacudió las neuronas con un viaje relámpago a Mendoza (perdón Javi!!! se confirmó el viernes y no tuve tiempo de conectarme para escribirte...), donde me relajé, disfruté de bellísimos paisajes, tomé riquísimos vinos, y después de casi dos años, volví a ir a un estadio a ver a San Lorenzo.
Esto último trajo emociones encontradas, primero cierta inquietud, como un cosquilleo nervioso. Luego, apenás entré, una angustia enorme por extrañar a mi viejo, raro estar en un estadio sin él. Después, la satisfacción de ver a mi vieja contenta por primera vez en mucho tiempo, y al final la alegría del triunfo.
Por último, un dolor en el pie que me daban ganas de cortármelo!!!! jejeje pero valió la pena.
Saqué algunas fotos de paisajes, pero esas se irán viendo en el otro blog.
I'm back in town!

Gente de mierda hay en todos lados...

... e Internet no tenía por qué ser la excepción!
La necesidad de escribir este post, nace luego de pasar por el blog de Zorra.
Y lo pensé cien veces, y dudé si escribir o no, hasta que me dije a mí misma "que salga lo que salga".
Es que una persona (por llamarlo de alguna manera), se atrevió a pasar por allí y ofender gratuitamente; y sin ser la destinataria de las ofensas, me dolió, me dió bronca... Esta persona (que NO voy a nombrar porque no le pienso dar tráfico a su blog), dice cosas como "voy a dar mi veredicto", y quien le dijo que él tenía autoridad suficiente como para juzgar algo? y quien le dijo que el blog en cuestión estaba participando de algún tipo de concurso, como para necesitar un veredicto??? Si para colmo de males, este veredicto es "ud. me da asco", tenemos en frente un ser que además de tener ínfulas exageradas, es un maleducado; porque convengamos lo siguiente, si alguien viene a mi casa a insultarme, lo saco a patadas en el culo... por ende, si alguien viene a mi blog a insultarme, haré lo propio. O acaso los blogs son de lectura oblogatoria? Si algo no te gusta, no vuelvas, no leas... Pero la gente de mierda es así, viene, lee, te dice que lo tuyo es asqueroso con toda la libertad del mundo, y se creen dueños de la verdad.
Igual, respecto a este muchacho (que abusa de las expresiones "al servicio de la Patria", "pusilánime", "Moral"), me cayó la ficha... lo único que quiere es generar polémica para generar tráfico hacia su blog, a saber: crea un blog en blogger para tener un id para comentar, el blog que crea que en blogger tiene un sólo post que te dirije a su verdadero blog en wordpress y no tiene habilitada la navbar o sea que no te permite marcar su blog de blogger como de "dudosa reputación". Para que se entienda mejor, si el objetivo fuera distinto al que yo imagino, no necesitaría tanta parafernalia, firma como "invitado" poniendo su nombre y página, y listo.
Respecto a "una uruguaya" (y no lo digo en forma peyorativa, sino que ella se identifica así), me dice a mí, que no dé manija... ella dijo frases como "si el padre habla así, el árbol viene torcido de raíz", "ella hizo lo que pudo con su vida", y "la educación en la argentina es muy pobre", y resulta que soy yo la que da manija??? Vos, uruguaya (y te llamo así porque es la única descripción que das, ni siquiera un apodo, o una dirección de blog/mail), te crees con derecho a analizar a todos los argentinos porque tenés un familiar que vive acá? Yo me eduqué en este país, y mal que te pese y digas lo que digas, mi educación fue excelente y si querés comprobamos coeficientes intelectuales, te parece?
Acaso conocés a la familia de zorra como para hacer juicios de valor sobre la misma? En serio pensás que con todo eso que dijiste, desmereciendo a ella y a su familia, la estabas defendiendo?
Y después me decís que "gente como yo, es la que sobra", y yo te digo POR SUERTE, porque si las que sobraran fueran personas como vos, estaríamos en el horno.

Posteo esto acá, porque por respeto, me parece que no corresponde polemizar respecto a cosas que me joden a mí, en un blog que no es mío, y por lo tanto no la quise seguir en lo de zorra.
Asimismo Fernanda, si lees esto y la alusión a tu blog o a los comentarios que te hicieron, te molesta, no tenés más que mailearme, y elimino el post.

En internet hay gente de mierda, como en todos lados, pero menos mal que también existen muchísima gente que vale la pena.

Hace algunas noches atrás, The History Channel me sorprendió gratamente con el documental del recital de Queen en homenaje a Freddie Mercury (aquel recital donde George Michael hiciera una versión gloriosa de Somebody to love).
Pero lo que me trae a escribir no es ese documental, ni siquiera ese recital en sí, sino la catarata de recuerdos que me trajo de golpe, verlo hablar a Brian May.

Para ordenar la historia, mi hermana mayor me lleva 8 años, así que yo crecí escuchando "música de grandes". Mientras mis compañeritos de primaria leían la revista Anteojito, yo leía (o miraba las fotos más que nada) la revista Pelo, y mientras mis amiguitas morían de amor por Tino y jugaban a los Parchís, peleando todas por ser Yolanda, yo jugaba a que era Brian May y tocaba en Queen.

Mi hermana había grabado desde la radio el recital que Queen diera en el '81 en Velez (en un casette Ken Brown, nunca me voy a olvidar), y yo con mis 7 añitos a cuestas, tomé una paleta de madera gruesa, de esas que se usan todavía para jugar pelota-paleta en la playa, y con mis marcadores le dibujé las cuerdas, los trastes, y hasta la "palanquita".
Con mi guitarra ya armada, tomaba el grabador que mi papá me había regalado (igualito al de la foto que encontré vía google) , le sacaba el cassette de Queen a mi hermana, y en medio del living me pasaba horas jugando a que era Brian May, tocando la guitarra junto a Queen. Era genial, porque además, todos esos gritos y aplausos grabados, eran para mí!!!
Además, cantaba todos los temas fonéticamente (para decir de alguna manera que cantaba lo que yo entendía), por lo que luego de un par de horas, el juego se terminaba cuando mi santa madre perdía la paciencia y mandaba a callar a mí, a Queen, y a cualquier otra cosa que hiciera ruido en la casa.

Lindos recuerdos de la infancia...

Frases célebres III

Hoy tuve que ir a una reunión en otro edificio. Cabe aclarar que, debido a la operación del pie, todavía camino despacio y con cierta "renguera", situación que parece ser motivo suficiente para exasperar a muchos transeúntes del microcentro porteño.
Uno de estes transeúntes, directamente me corrió hacia un costado (eso sí, mientras me empujaba, decía "permisoooooo"), y al rebasarme, como no podía ser de otra manera, me pisó el pie operado.
Si no hubiese estado con mi jefe, todavía estarían tratando de aflojar mis manos del cuello del mencionado peatón...

El relato de este hecho a uno de mis compañeros de trabajo, dió origen a esta tercera edición de frases célebres, cuando me dijo:

"El problema no es que haya idiotas, el problema es que SON MUCHOS!"

Amor enfermo

Una vez, hace mucho tiempo, enfermé de amor...
Los síntomas eran diversos, palpitaciones, insomnio, angustia, ansiedad, y una profunda tristeza que invadía el cuerpo, haciéndose dueña de todo.
Tenía la errónea idea de que un instante de felicidad a su lado, bien valía la eternidad de sufrimiento en la que me sumían sus reiterados desplantes.
Ilusa! tenía la certeza de que tarde o temprano se daría cuenta de lo incorrecto de su escala de valores...
Me recuerdo, y me veo como en una película, no puedo creer que esa era yo, encerrándome en mi casa esperando un llamado suyo... dejando de vivir mi vida, a ver si de casualidad en su apretada agenda le quedaba un rato para venir a verme... soportando lo insoportable con estoica sonrisa.
Debo agradecerle porque un día, armado de la pócima mortal "no sos vos, soy yo", le firmó el acta de defunción a ese amor enfermo terminal.
Porque después de un tiempo, me dí cuenta de que no estaba enferma de amor, sino que estaba atrapada en un amor enfermo, de esos que te desequilibran mentalmente, y no te permiten ser quien realmente sos, que te hacen perder la perspectiva.
Me dí cuenta de que no llevaba la vida que yo quería para mí, y que como dice la Venegas, "no voy a decir que no merezco esto, porque es probable que lo merezca pero no lo quiero".
Un día volvió, pero yo estaba curada de ese amor enfermo, y pude decirle que ya era tarde, que la venda de mis ojos había caído, que había visto la película donde yo era protagonista de un papel patético, y que jamás volvería a actuar de esa manera.
No quise sus explicaciones, ni sus ruegos, ni sus promesas... ya no hacía falta que él cambiara, porque yo había vuelto a ser la persona que me gusta ser.

El tiempo pasó, y cuando las heridas sanaron, volví a amar y a dejarme amar, pero con un amor sano... ese tipo de amor que - parafraseando un comentario que leí en otro blog - me hizo ver a mi amado en colores, cuando el resto de la gente parece en blanco y negro; un amor donde se construye de a dos, sin que ninguno imponga sus reglas y someta al otro.
Hoy recuerdo sin dolor, precisamente porque las heridas sanaron... yo no creo en eso de que un clavo saca a otro clavo, tiene que ser uno el que ponga el punto final, haga balance, descubra que ganó y que perdió, y ponga el contador en cero. Recién ahí, se puede abrir de nuevo el corazón sinceramente...

Hoy puede ser un gran día...

Hay algo muy simple, y que sin embargo logra que empiece el día con la energía a tope: seleccionar el shuffle* del Musicmatch (programita que uso para escuchar mp3 en la oficina), y que el primer tema sea el que más me gusta de toda la lista.
Si encima tenemos en cuenta que ese tema es Perfect Day, de Collective Soul, no sería una señal de que hoy puede ser un gran día?

* shuffle: hace que se rearme la lista aleatoriamente

Anécdota "literaria"

Leyendo este blog (dicho sea de paso, excelente blog al que llegué siguiendo algún link en otro blog), me acordé de una anécdota que me hizo reir durante mucho tiempo...

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Hace algunos años atras, recorriendo con un grupo de amigos una peatonal que se extendía por unas cuantas cuadras, con un promedio de una librería por cuadra, uno de los muchachos decidió aprovechar esta característica para pedir un libro que venía buscando hace rato, y que se encontraba agotado.
Siendo así, nos encontramos ingresando a cada librería con la misma pregunta: "tenés ...y un día Nico se fue, de Osvaldo Bazán?".
Las reacciones de los consultados eran diversas, en un par de casos, lo miraron de arriba a bajo despectivamente, respondiendo un seco "no, está agotado", llevándonos a pensar que deberían estar hartos de que la gente entrara con la misma pregunta, nos imaginamos que debería ser un éxito rotundo.
Marlena:- Che X, de que trata el libro, que se está vendiendo tanto?
X:- Ah, no sé, ni idea... Lo recomendó Andy en el programa de radio, y si él lo recomienda es porque debe ser bueno.
M:- Ahhhh ok, y el autor es Osvaldo Bazán el periodista de espectáculos? o es otro que se llama igual?
X:- Ni idea, no lo conozco a Osvaldo Bazán.
M:- ..........................
Entramos en otra librería, misma pregunta. El chico del mostrador, revolea los ojo y suspira:
Vendedor:- Está agotado, pero ya salió la reedición, así que debe estar por entrar, si querés me dejás tu teléfono y cuando llega te llamo.
X:- No, está bien, gracias, no soy de acá.
V:- Pero cuanto tiempo te quedás? Porque a lo mejor entra esta tarde, o mañana a la mañana.
X:- No, no, vine a pasar el día nada más, gracias de todos modos.
V:- Seguro que no me querés dejar el teléfono? por las dudas digo...
X:- No, gracias, chau.
X fue motivo de bromas durante un rato, porque nos dió la sensación de que el vendedor tenía otras intenciones con él.
Otra librería, una chica en el mostrador, y otra vez la pregunta (debo confesar que todos los demás estábamos un poquito cansados del tema, y rogando que encontrara el dichoso libro). Esta vez, la chica lo miró con cara de "mis mejores amigos son, uno gay, uno negro y el otro judío", y le contestó la tan ansiada respuesta: "siiiiii, llegó esta mañana, lo tenés en aquella mesa que tiene el cartel de novedades".
Todos festejamos, y salimos a fumarnos un pucho (si, en esa época todavía fumaba) mientras X, hacía la compra.
Al los 2 minutos sale X, con cara de traste y las manos vacías.
Todos a coro:- Qué pasó?????!!!!!
X:- Nada, menos mal que leí el prólogo antes de comprarlo, es la historia de amor entre dos putos!!! (sic)
Todos los demás estallamos en carcajadas, y obviamente X fue el foco de todas las bromas durante el resto del viaje. A mí me quedaron varias conclusiones, además de una anécdota graciosa:

• Si seguís a la manada, te podés llevar sorpresas.
• Si sos un comunicador con onda, tenés un poder de convicción asombroso en todos los giles que sólo siguen a la manada.
• Mi amigo X, a pesar de dársela de open minded, es homofóbico.