Había tanto para decir...

Pero otro maldito día obligada a quedarme hasta tarde en la oficina... ni siquiera cenamos, picoteamos un par de porquerías que nos tentaron, subimos a ver tele, la temperatura se elevó por demás así que cambiamos la tele por musiquita cachonda y un buen rato ardiente nos sacudió la mufa del día.
Bañito calentito, paseamos a la bestia tomados de la mano, y ahora él duerme mientras yo escribo un poco... no sabe que escribo un blog, no creo que le guste, así que es my-little-secret.
Tengo que investigar como poner bonito este bloguete, porque lo veo muy chatito y me disgusta...
Tengo sueño, me voy a la cama a abrazar a mi negrito y capaz que ligo una cucharita...