Ayer fue el cumpleaños de mi negro, y como de costumbre, no quiso festejos. Habíamos planeado salir a cenar sólo nosotros dos, como otras veces.
Pero se me ocurrió cambiar de planes y sorprenderlo, así que en el horario del almuerzo me escapé de la oficina a hacer algunas compras... Velas, un buen Malbec, lencería nueva...
Preparé un Chow Mien, que se que le encanta, y armé una mesa romántica (no pude resistirme a tomarle algunas fotitos). Él eligió algo de blues como banda de sonido.
La velada fue perfecta, aún más cuando recordamos que teníamos guardada una botella de champagne Extra-Brut, para alguna ocasión especial... y esta era una ocasión muy especial.
Hoy estamos muertos de sueño y con una resaca infernal, pero una noche inolvidable bien lo vale.
Hace 6 meses.
4 comentarios:
feliz cumple a tu negro y que sigan por muchos muchos cumples mas juntitos..
un beso y esta noche nada de joda, a dormir temprano.. jajajajaj
AHHHHH PILLINA!!!!
felicidades al muchacho
Araña: Gracias! y si, esta noche a dormir temprano, que ya no estamos para estos trotes jejeje
Gonchi: y... una se la rebusca, vió?
Besos!
Ahhh q buen detalleeeee... Feliz cumpleaños a tu Negro!
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